Micro diferencias globales

Hace unos momentos Francia venció a Portugal 1-0, el gol cayó por la vía del penalty.

Al inicio del partido el enviado de Radio Formula comentó (a manera de hacerse el re mamón) que el público era algo así como la diferencia entre Calderón y el Peje unos poquitos más de un país que de otro.

Según otro comentarista Henry conducía el balón y pusó un pie dentro del área después llegó un portugués le dió algo así como una patada y Henry nomás se dejó caer, el "albitro" marcó penal.

Ambos equipos mostraron un nivel casi igual de futbol pero al final la diferencia fue ése gol.

No les dio para más, no había para más.

A lo que este comentario va es que tal vez dentro de poco la humanidad tendrá que buscarse otros modos de definir campeones, presidentes, etc, etc et al. (los etc pueden esperar siglos)


Porque las diferencias entre las competencias de cualquier tipo las tenemos casi que dominadas, así que el vencedor del perdedor se define por una genialidad como la no una sino dos que tuvo Italia sobre Alemania ayer. En ese caso se debería premiar al genio de esas jugadas, al colmilludo o al super cascara como se dice en el llano.

O sea, la Federación Internacional de Volados, rayuela, similares y conexos propone un mundial de volados o rayuela para que los mexicanos no nos traumemos y seamos líderes en algo.
¡Por favor! ¿Sí?

Gracias, las competencias serán cada sábado con un día de duración y así los participantes podrán jugar en las principales banquetas del mundo.

¿La copa?
Ah sí.
Será grande y repleta del lícor embriagante que sea típico del país sede, no sólo para el ganador sino para todo áquel que tenga sed y asuma su responsabilidad de beber, de lo contrario podría terminar en un mundial de puros briagos y no, no y no, los mexicanos somos briagos pero decentes.

Por lo pronto Allez la France!

Por cierto, el computo de votos de la elección presidencial de México nada tiene que ver con esa putita y truqueada página web llamada PREP. Dentro de unos pocos puntos porcentuales cuando la tendencia sea irreversible podremos decir Good bye a Mister FeCalHin